Empezamos este campeonato en el curioso circuito de Blackwood, que tiene algunas caracteristicas que merece la pena repasar.
El fin de fiesta del campeonato DTM se corre en un circuito con complejo de intestino delgado en el que la puesta a punto será fundamental así como la estrategia de paradas. De lo que no hay duda es que será una carrera entretenida y sin descanso.
Bienvenidos al templo de la velocidad, donde los hombres son hombres y las escapatorias escasas. Las largas rectas y las chicanes más indigestas pondrán a prueba la pericia de nuestros valientes pilotos que lucharán por sobrevivir sin tener que dar parte al seguro.
Hala, todos a dar más vueltas que un ventilador en el circuito de Norisring. Mucho cuidado con la curva doce.